BODEGAS ALONSO, VINOS CON HISTORIA Y CARÁCTER

El proyecto nace en uno de los históricos inmuebles de Pedro Romero, ubicado en el Barrio Bajo de Sanlúcar de Barrameda. Tras pasar a manos de los hermanos Fran y Fernando Asensio Alonso, este lugar mantiene vivo un fragmento de la historia de la emblemática bodega fundada por Vicente Romero Carranza en 1860, preservando su legado y tradición en cada rincón.

En 2006, la propia bodega Pedro Romero adquirió las preciadas botas, vinos e instalaciones de Gaspar Florido, también situadas en el Barrio Bajo, junto con las de Bodegas Méndez, un reconocido almacenista de El Puerto de Santa María. Este patrimonio enológico representa una parte esencial de la identidad vinícola de la región.

El sueño de Fran y Fernando es fusionar su proyecto personal, la manzanilla “Velo de Flor”, con la misión de dar a conocer al mundo estos vinos viejos, auténticas joyas que cuentan la historia y la esencia de Sanlúcar. Su trabajo se distingue por un enfoque profundamente artesanal, que se refleja en todas las etapas de producción: desde la elaboración, hasta el embotellado, etiquetado y demás procesos, cuidando cada detalle con el máximo respeto por la tradición y la calidad.

Este proyecto no solo celebra el pasado, sino que también impulsa un futuro donde la autenticidad y la pasión por el vino son los pilares fundamentales.