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ESTAMOS EN NUESTRO 20 ANIVERSARIO

MIGUEL CASTRO MAILLO

En la distinguida zona de Montilla-Moriles, se encuentra el proyecto vitivinícola de Miguel Castro Maíllo, un enólogo apasionado por expresar la pureza de la variedad autóctona Pedro Ximénez. Su enfoque se centra en viñedos tradicionales en vaso, plantados hace entre 40 y 80 años, ubicados en parajes como Riofrío Alto o Benavente Alto en la Sierra de Montilla, que se asientan sobre suelos de albariza calcárea típicos de esta región. La vieja edad de las cepas y los suelos pronunciados contribuyen a una gran concentración de aromas y una autenticidad territorial inconfundible.
Entre sus creaciones se encuentran vinos destacados como El Emir, un naturalmente dulce de Pedro Ximénez pasificado al sol y sometido a vendimia manual, con una producción limitada que acentúa su carácter singular. También el Estático, un vino blanco elaborado mayoritariamente con Pedro Ximénez (combinado con Perruno en algunas expresiones), que fermenta bajo velo de flor y envejece en bota durante 24 meses, logrando una textura serena, compleja y embriagadora. Otra referencia notable es Ojo y Colillo, un vino blanco de Pedro Ximénez (con un pequeño porcentaje de otras variedades autóctonas), fermentado y criado bajo velo de flor en botas de 500 l, lo que le otorga volumen y tensión sobre un fondo salino y especiado.
Miguel Castro Maíllo encarna la fusión ideal entre tradición y sensibilidad moderna. Todos sus vinos surgen de práctica artesanal, con mínima intervención y una visión que prioriza la fidelidad al terruño y la expresividad vinícola más pura. Gracias a su trabajo meticuloso, sus elaboraciones se han convertido en referencias distinguibles dentro del panorama de Montilla que reflejan carácter, historia y alma andaluza.

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