Este blanco se elabora con un coupage a partes iguales de Manda Huevos Blanco de las añadas 2015 y 2016; de ahí procede, también, su nombre: Doble Yema. Se trata de un blanco muy equilibrado, con un perfil aromático complejo (frutas, minerales, ahumados...) y un paso por el paladar suave y largo.
La añada 2015 tuvo una crianza sobre lías de 30 meses con removidos, mientras que la 2016 tuvo una crianza sobre lías de 18 meses, también con removidos.