Emocionante manzanilla, única en la historia de Delgado Zuleta. Estamos ante una bota vaciada, una única vasija seleccionada por el enólogo de una pierna de la solera de La Goya proveniente de la antigua bodega Cuestecilla. Este casco bodeguero estaba ubicado estratégicamente en el Barrio Alto de Sanlúcar, y se caracterizaba por una elevada humedad y aireación que provocaba una intensa crianza del velo de flor, otorgando una extraordinaria complejidad aromática y una sedosa suavidad en boca, inequívoca seña de identidad del alma, la esencia y el estilo de Delgado Zuleta. Sólo 600 botellas numeradas con una presentación Premium